El 21 de septiembre se celebra el Día Mundial del Alzheimer, la forma más común de demencia y una enfermedad que hace referencia a la pérdida de memoria y otras habilidades cognitivas que interfieren en la vida cotidiana.
A menudo es común que las secuelas del Alzheimer y la pérdida de estas capacidades cognitivas y sensoriales terminen pasando factura a los pies, en forma de úlceras u otras complicaciones más graves.
Por ese motivo, es especialmente importante que estos pacientes se realicen revisiones podológicas periódicas para comprobar su estado. Además de esto, a medida que la enfermedad avanza, es normal observar una mayor inestabilidad en la marcha, con la disminución del tiempo de vuelo del paso y el aumento del tiempo de apoyo (lo que se traduce en caminar dando pasos cortos).
Lo ideal es lavarlos con agua templada cada día y secarlos con cuidado, haciendo un examen preciso de su estado.
Si tienes cualquier duda o necesitas la atención de especialistas con años de experiencia en Podología, visita nuestra clínica en Santa Cruz de Tenerife.